Caso Cecilia: la coartada de Emerenciano Sena para despegarse del femicidio
El líder piquetero declaró por primera vez en el caso. Buscó ubicarse en otro lugar en el momento en el que los investigadores creen que se produjo el crimen en su casa.
El líder piquetero Emerenciano Sena (58) pidió declarar ante el equipo de fiscales que lleva adelante la investigación por el presunto femicidio de Cecilia Strzyzowski (28), desaparecida hace 18 días cuando se la vio entrar por última vez a su casa, ubicada en Resistencia. Sena declaró durante 15 minutos, dijo ser inocente y su abogado afirmó que van a «presentar nuevas pruebas». De esa manera empieza a construir su coartada para despegarse del caso.
Así lo confirmaron a Clarín fuentes judiciales. Fue la primera vez que el referente social habló en el marco de la investigación que lo tiene como imputado. Su hijo César (19) y su mujer Marcela Acuña (51) ya habían declarado, aunque en calidad de testigos, cuando todavía lo que se investigaba era una desaparición.
Además comentaron que Acuña pidió declarar nuevamente. La misma tendría lugar este miércoles.
«(Emerenciano) pidió espontáneamente declarar. Le pareció importante decir su verdad», contó escuetamente Juan Carlos Saife, abogado del matrimonio piquetero, en la puerta de la fiscalía. De acuerdo a lo que dejó entrever, la declaración estuvo centrada en aclarar dónde estuvo él durante la mañana y tarde del 2 de junio, cuando se cree que tuvo lugar el femicidio.
Luego se negó a contestar preguntas de los fiscales. Se espera que aporte testigos en los próximos días que permitan corroborar la versión sobre dónde estuvo exactamente.
Saife además manifestó que a Sena (quien es diabético) le había bajado considerablemente el azúcar estando detenido en la comisaría, lo que derivó en una serie de atenciones médicas. De cualquier manera, la defensa no presentó pedido de detención domiciliaria.
Por otro lado, confirmó que Acuña continúa con una huelga de hambre en la prisión, aunque no confirmó los motivos. Según había trascendido en un primer momento, era para solicitar una prisión domiciliaria para su marido.
La declaración indagatoria de Sena llega en una jornada donde parece comenzar a romperse el «pacto de silencio». Bien temprano en la mañana, el chofer Gustavo Obregón (uno de los siete imputados) pidió ampliar declaración ante la fiscalía y dio precisiones sobre un lugar en el arroyo en las afueras de la chanchería donde se habrían arrojado las bolsas con restos óseos.
Ese rastrillaje tuvo resultado positivo. Se hallaron restos óseos, que deberán peritarse para confirmar si son humanos. Los mismos serán enviados a Córdoba, donde trabaja el equipo de antropología forense del Poder Judicial, que colabora activamente con la causa.
En ese hallazgo apareció además un objeto que podría ser clave, aunque las fuentes evitaron confirmar de qué se trataba. Se trataría de un dije, según confirmaron fuentes judiciales a Télam.
Los hallazgos se realizaron tras rastrillajes con buzos tácticos en el Río Tragadero, ubicado en las afueras de la Chanchería. Para ello debieron drenar el cauce de agua que pasaba por el lugar.
Sena y Acuña están detenidos desde el viernes 9 de junio, cuando la policía encontró evidencias en un allanamiento en su casa que los involucraron como posibles encubridores de la desaparición de la chica. Luego, esa calificación mutó a femicidio.
fuente: Clarin