Izaguirre: “¿Quién manda en la provincia, el Gobernador o el narcotráfico?”
El titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina llegó al Chaco y advirtió que los “mercaderes de la muerte tienen sus socios en las fiscalías, en los juzgados y en la propia Gobernación de la provincia”. Acompañado por el Foro Popular contra el Narcotráfico y varios movimientos sociales, convocó a votar a “gente que los defienda, no que los condene a muerte”.
Mientras el presidente Fernández escapa de los problemas de su gestión a nivel nacional y se refugia en la puesta en escena preparada por el gobernador Capitanich, en El Impenetrable, lejos de las protestas de la capital chaqueña; el titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina, Claudio Izaguirre, participó de una asamblea frente al Juzgado Federal de Primera Instancia Nro. 2 de Resistencia, donde se planteó la dura situación que viven los sectores más vulnerables por el accionar del narcotráfico y sus múltiples ramificaciones.
A la hora de hacer uso de la palabra, Izaguirre agradeció a “Miguel Chamorro y a todo el grupo que lo acompaña porque vienen luchando contra aquellos que vienen aplastando, matando y asesinando a sus familias”, en referencia a un grupo de familiares de víctimas que participaron de la asamblea, al igual de algunos movimientos sociales.
“Caminaba por uno de los barrios y veía que hay un centro de rehabilitación de adictos, con las puertas cerradas, y al lado, un basural”, dijo Izaguirre en referencia al Centro Preventivo Local de las Adicciones en el Gran Toba de Resistencia y agregó que “la recuperación de las personas, para esta provincia, es considerado una basura. Desde ahí podemos empezar a pensar una ciudad desde el punto de vista de esta gente”.
“Hacia el año 1600, un cura paraguayo que tomaba tereré como todos los paraguayos, decide ponerle agua caliente y crea lo que hoy nosotros conocemos como mate”, recordó Izaguirre y aclaró: “Crea el mate para combatir el alcoholismo entre los originarios, alcoholismo que había sido creado por el español, que había metido el agua ardiente para que se maten entre ellos. Pasaron 500 años y hoy están haciendo lo mismo, le meten la falopa a tus pibes para enloquecerte la vida, para que no te organices, para que te quedes llorando en tu casa. Y cometen errores, por ejemplo, este asunto de no combatir a los sicarios que andan en moto”.
“Los servicios de inteligencia de Gendarmería y Prefectura saben exactamente quienes son y donde están”, explicó el titular de la organización nacional y aclaró que “lo que esperan es la orden del Gobernador de la Provincia para acabar con estos tipos, porque no tienen garantía ninguna de terminar bien parados cuando se dediquen a combatir a estos tipos”.
Sobre el Gobernador, Izaguirre aclaró que “no es una marcha en contra de él, es para llamar la atención” y advirtió que “Capitanich tiene dos hijas y el narcotráfico nunca está satisfecho con nada, por ahí el próximo muerto es una de las hijas de Capitanich porque el tipo no ha decidido combatir a estos ‘motogatilleros’. Lo mismo le pasa a este juez con tres hijos”, en referencia al titular del juzgado donde se realizaba la asamblea.
“La realidad es ésta: el narcotráfico avanza y la gente pobre tiene que agachar la cabeza”, sentenció, para luego preguntarse: “¿Quién manda en la provincia? ¿El Gobernador o el narcotráfico?”. Porque “si estos tipos tienen su propio ejército, deben ser estos los que mandan. Por eso, en las próximas elecciones elijan gente que los defienda, no que los condene a muerte todo el tiempo”.
“He escuchado historias acá, que me dejan pensando: los damnificados presos y los homicidas libre, gracias a los jueces”, reflexionó y luego advirtió que “yo vengo de meter preso al juez federal Soto Dávila del Federal 1 de Corrientes, porque era el responsable del paso de 15.000 kilos de marihuana semanales, desde Corrientes a todo el territorio nacional. Es decir, conozco bastante bien este grupo de personas que manejan el poder judicial, que defienden y cobijan a los delincuentes y que oprimen a la gente que necesita justicia; hasta que un día, la gente se canse y les termine prendiendo fuego la casa al juez”.
“El daño es profundo, pero la decisión final es de cada uno de Uds.”, dijo señalando a los presentes y reivindicó a Miguel Chamorro y su trabajo “en esta lucha contra los mercaderes de la muerte”. Sin embargo aclaró: “tenemos que entender que los mercaderes de la muerte tienen sus socios en las fiscalías, en los juzgados y en la propia Gobernación de la provincia”.
Finalmente, Izaguirre dejó un desafío: “O saneamos la política y ponemos gente que ayude a la gente pobre o la gente pobre se va a enojar. Porque la gente pobre está repodrida”.