«Barrio custodiado y monitoreado por vecinos», contra la inseguridad

‘La re c… su madre!, no entienden que este barrio está custodiados y monitoreado por sus vecinos?, en caso de no entender será explicado a garrotazos‘.

El mensaje, duro y alarmante, fue plasmado por vecinos del barrio Villa Don Rafael; que se cansaron de los ‘permanentes‘ hechos de inseguridad que se reiteran, día tras día, en esas pocas manzanas detrás de la Laguna Argüello.

Desde la Casa de Gobierno, epicentro de la actividad institucional de la provincia, no son más que unos pocos minutos en auto. Sin embargo, las respuestas institucionales de la policía y la Justicia, no terminan de convencer a quienes habitan la zona; por lo que decidieron cerrar filas y defender sus pertenencias y su integridad física de manera colectiva.

‘Vivimos, virtualmente, en una zona liberada: estamos en el límite de las jurisdicciones de las comisarías primera y octava; y eso hace mucho más complicada tanto la solicitud de ayuda, como la respuesta que puede dar la fuerza‘, explica P., un vecino del barrio que, como todos los consultados por NORTE, pidieron expresa reserva de la identidad por miedo a futuras represalias.

PRÁCTICA RECURRENTE

En rigor, la organización comunitaria para monitorear ‘el movimiento‘ en el barrio es una práctica cada vez más utilizada, a partir de las facilidades para transmitir mensajes que brindan distintas aplicaciones. En buena parte de los casos, la policía participa de estos espacios que, casi siempre, operan en la delgada línea que separa a las buenas intenciones y los prejuicios.

En el Don Rafael, el grupo está integrado solamente por vecinos. ‘Este era un barrio tranquilo, hasta hace unos años se podía estar en la calle y rara vez se corría algún riesgo; pero hoy la situación cambió y por eso entendimos que no nos queda otra que cuidarnos entre nosotros‘, aseguró.

‘El dispositivo consiste en la organización de los vecinos, a través de un grupo en el que vamos informando si vemos algo fuera de común, y ahora sumamos cámaras de seguridad, el cartel es una invitación para que tengan en cuenta lo que podría pasar en caso de hacer lo contrario‘, contó a este medio JP., otro vecino del barrio, uno de los más nuevos en la zona. Asegura que si bien no tuvieron que sufrir consecuencias graves por los episodios de inseguridad, los hurtos y robos están ‘a la orden del día‘. ‘En cualquier descuido, seguro que pasa alguien y se queda con algo‘, describió. Sin embargo, aseguró que ‘desde que instalamos el cartel, vimos que menguaron los episodios, pero no queda otra que seguir en alerta‘.

fuente: Diario Norte