La UTA advierte que «si no depositan el dinero» vuelven a parar
El gobierno girará los fondos para el pago del medio aguinaldo, de no hacerlo, volvería el cese del servicio de transporte.
Desde el amanecer de hoy se restableció el servicio de colectivos en el área metropolitana, luego de que ayer el gobierno, concesionarios del servicio y la Unión Tranviarios Automotor (UTA) firmaran un acta-acuerdo en la cual se plasmó que el Ejecutivo giraría en el transcurso de la mañana los fondos y que prácticamente de manera automática se haría la transferencia a los choferes para cubrir la segunda cuota del sueldo anual complementario, ya que la falta de pago fue lo que originó la medida de fuerza.
En concreto, se destinarán $308 millones del programa Chaco Subsidia como parte de las compensaciones que efectúa el Estado provincial para el mantenimiento de la tarifa o bien para suplir lo que no envía la Casa Rosada, un reclamo presente en los operadores y hasta en gobernadores en los últimos años, atento a la discriminación a favor de la Ciudad Autónoma y la Provincia de Buenos Aires, que se queda con gran parte de los fondos.
A quien poco le importan estas cuestiones, pero quien más padece la situación es el usuario, que otra vez debió recurrir a medios alternativos para trasladarse y la alternativa más a mano fue un remís o radiotaxi, en los que cualquier viaje promedio ronda los $2500 como mínimo.
¿CÓMO SIGUE?
El escenario que describen los empresarios no es el mejor como no lo es para la economía en su conjunto en los meses que se vienen, el «sinceramiento de precios» que se presenta llega a insumos y salarios y los concesionarios indican que no mayores opciones que equilibrar vía aumento del pasaje o bien subsidios.
El gobierno provincial optó por el silencio ante el primer conflicto que afrontó con el sector, pero sabe que no tiene mucho más margen que subir el costo de cada viaje en el corto o mediano plazo.
En tiempos en los que desde la administración Milei señala que habrá un retiro gradual de los subsidios, empresarios sostienen que si el Estado toma la decisión de dejar de pagar las compensaciones cada viaje debería costar $800. Situación a la que naturalmente no se llegará tanto porque el gobierno no dejará de aportar por el costo político que acarrearía y los concesionarios saben que ese valor es impagable para los usuarios por la erogación que representaría en el mes. Por lo pronto se aplicará desde el primer día de 2024 la actualización que quedó pendiente de este año, de llevar de $75 a $85 cada boleto.
Para aumentar, habrá que seguir el procedimiento administrativo y convocar a una audiencia pública con al menos un mes de antelación, por lo que difícilmente hasta marzo no se dé otro incremento más que los $10 confirmados.
fuente: Diario Norte
