Caro y escaso: es una odisea conseguir gasoil en la ciudad y en el campo
En ámbitos urbanos conductores peregrinan por los estaciones de servicio. La producción también siente el déficit para el trabajo diario.
El incremento periódico pasa a un segundo plano cuando no se consigue el producto, quien lo precisa, resignado, abona víctima del ‘abecé‘ del mercado que da cuenta que cuando un producto demandado escasea, su valor se encarece.
Pero, si se trata del gasoil, clave para que una gran parte de vehículos de uso familiar pueda circular, para que el transporte público también cuente con el combustible para los micros y para el sector productivo en lo que el traslado de la producción o el trabajo en el campo el escenario es complejo.
Ayer se confirmó que YPF y Axxion se sumaron al incremento del 2,5% solamente para productos diésel que había establecido Shell para todos los surtidores del país. En el caso de la petrolera estatal la suba se aplicó de forma escalonado y se fijó en primeramente en el interior provincial.
Impera la falta de previsibilidad, en razón de que estacioneros no cuentan con certezas respecto de cuánto recibirán y entonces se racionalizan las ventas cuando no directamente los surtidores están inactivos por la falta de diésel.
‘Creemos que es una situación que se extenderá por al menos dos meses más‘, señala Mauro Silvestri, dirigente de la Cámara de Expendedores de Chaco sobre una coyuntura en la que el clima también influye de manera negativa, en razón de que la bajante del Paraná impide la navegabilidad de barcazas que llegaban al puerto de Barranqueras.
‘Hoy el río está en 1,95 metro con tendencia bajante y necesitamos que esté al menos en los tres metros para que entren barcazas convencionales‘, explica Roberto Benítez, administrador del puerto Barranqueras.
INFORMALIDAD
‘Ingresan los camiones y se descargan, hoy existe demasiada informalidad, hay una realidad distinta a años anteriores‘, expresa Silvestri.
El dirigente aclaró que cada estación de servicios después adopta políticas en función de su stock teniendo siempre una mirada distinta a lo que ocurre con expendedoras ubicadas en rutas, donde concurren en mayor medida vehículos de mayor porte que demandan más gasoil a las que están en ciudades.
«Pensábamos que con el aumento la provisión se solucionaría»
Para el sector productivo las complicaciones pueden ir desde no contar con el combustible para movilizar tractores u otros vehículos para la labor diaria en el campo como también no saber si enviar hacienda u otra producción en razón de que aquel camionero que sale a la ruta no sabe si aún con el tanque lleno podrá volver a abastecerse en caso de que la distancia que separe el punto de origen y destino no sea suficiente con el gasoil que cuenta.
‘Pensábamos que con el aumento la provisión se solucionaría‘, señala Martín Spada, director de Federación Agraria, en razón de que una de las posibilidades era que la importación de diésel bastaba para abastecer al mercado interno pero está visto que no.
‘Algunos pueden comprar a granel pero se paga 195 el litro en la versión Premium y $ 145 en la tradicional‘, marca el dirigente para indicar que los valores son mayores que los quese abonan en el surtidor en caso de que la especulación pueda más y la estación de servicio prefiera vender de ese modo para ganar más.
‘Si estás sobre las rutas 11 y 16, los camiones internacionales vacían los surtidores y hay que esperar entre 5 y 10 horas para que carguen unos $ 5000 en una camioneta‘, indicó.
‘Es muy difícil pensar en producir en este contexto cuando no tenés las mínimas certezas que se requieren‘, cerró el dirigente.
fuente: Diario Norte